¿Rozaduras en la bici?

Tenemos la solución

 

Sabemos que es un tema taboo, pero calma, solo tú estás leyendo esto, y cuando arregles ese problema, se lo querrás contar a todo el mundo.

Problema

Para empezar, tenemos que hablar del problema. Las rozaduras son comunes, y aunque entre más ruedes más te adaptas al sillín, las rozaduras no respetan experiencia, y es importante cuidarlas, especialmente si practicas en condiciones húmedas. Son dolorosas, y pueden limitar tu entrenamiento de los días siguientes. Más aún, pueden ser muy incómodas en el día a día, fuera de los entrenamientos, y poner a algunos en la duda de si seguir o no con este juego llamado triatlón.

Solución

Pero calma. Hay una solución, usada tanto por profesionales como por principiantes. En inglés, las encontrarás como «chamois cream», y en español es probable que te la vendan como crema antirozaduras. Se trata de una crema antibacterial, que además de esa función, también cumple con la de lubricar la zona del sillín, con lo que las rozaduras disminuyen al mínimo. Las marcas más frecuentes son Chamois Butt’r y Assos chamois cream. Se aplica, antes de rodar,en la zona que está en rozamiento con el sillín, y voilá!  tu trasero no sufrirá de rozaduras nunca más.