Glúteos fuertes para una zancada larga

Asegúrate de que tu zancada se origine en tus pompis

 

 

La vida godín y el mal hábito de permanecer sentado todo el día frente a un ordenador se han convertido en uno de los principales agentes de riesgo para la salud de las personas, pero si eres triatleta el problema se agrava aún más ya que este hábito también puede tener un impacto en la calidad de tus entrenamientos, principalmente cuando entrenas la carrera a pie.

 

Debido a que mantenemos inactivo nuestro trasero todo el día, éste a veces finge demencia y se olvida de lo que se supone que debe hacer cuando es hora de correr. Si acostumbras entrenar después del horario godín puede ser que tus glúteos no respondan como quieres.

 

De acuerdo con la fisioterapeuta Bryan Cerro, sentarse por horas pone los flexores de la cadera en una posición acortada lo que limita su capacidad de extender la cadera y te hace disminuir la longitud de zancada. Esta transición de inactivo a activo puede causar más tensión en los cuádriceps, los isquiotibiales y los músculos inferior de la pierna.

 

Es muy importante enfatizar que tus pompis son los grandes motores de una máquina (tu cuerpo) que nada, pedalea y corre, de hecho sólo después del abdomen son los músculos más grandes del cuerpo (sí, aplica para todos los cuerpos aunque no lo creas),  y es un hecho que unos glúteos débiles vuelven a los triatletas blanco de lesiones.

 

¿Cómo saber si tengo unos glúteos débiles?

Averígualo haciendo un sentadilla de una sola pierna, si puedes llegar a un ángulo de 80 grados o más, es muy probable que tengas unos glúteos fuertes y capaces de soportar la carga. Pero si luchas para llegar a 80 grados de flexión, en cada pierna, es necesario que te centres en fortalecerlos con ejercicios individuales.