¡Siéntate bien!

Elige bien tu sillín y aprende a sentarte correctamente.

 

En ocasiones nos hemos sorprendido al ver triatletas que llevan bicicletas de más de 60.000$ y, sin embargo, su sillín no es el más adecuado. No paran de moverse sobre la bicicleta y al finalizar la rodada sienten molestias y dolores. Todo ello por no haber elegido el sillín óptimo, y eso que la oferta es más que variada.

Lo que tienes que tener en cuenta a la hora de elegir tu asiento son dos factores: el ancho y la flexibilidad. Para ello te recomendamos un análisis que podrás realizar en cualquier tienda especializada, donde te medirán tu apoyo y así escogerás mejor. 

El ancho más estandarizado en la industria de los sillines suele estar en torno a los 140 mm. Este ancho es el apoyo de los isquiones (huesos de la cadera) con la cobertura del sillín. Los tres anchos más comunes, según el estudio que realizó Specialized son 135, 143 y 155 mm.

En cuanto a la flexibilidad, debemos tener en cuenta nuestra capacidad de “doblarnos” encima de la bicicleta. En función de dicha flexibilidad elegiremos un sillín más o menos  acolchado. Si tu posiciñon es intermedia, estás de suerte, ya que existen muchos sillines. En caso de tener más flexibilidad, tu sillín podrá ser más duro y cuanta menos flexibilidad (apoyo más vertical), el acolchado será mayor.

Por último les recomendamos tener en cuenta el peso corporal, ya que es otro factor esencial.