La cabeza en su lugar.

 

La cabeza es la parte más pesada del cuerpo, ponerla en la posición correcta no solo te ayudara avanzar, también aprovechar las respiraciones, sin desequilibrar tu cuerpo.

El problema surge cuando intentas evitar tragar agua y subes la cabeza demasiado arriba, por fuera del agua. Es lo que algunos técnicos llaman “respiración cabeza arriba”.

Los nadadores se agobian al interrumpirse tanto el flujo de agua como la propulsión hacia delante, que el resto del cuerpo está duramente intentando crear. ¿Cómo podemos mejorar esto? Simple: veamos tres tips para conseguir el máximo objetivo para mejorar tu nado: ¡MANTÉN LA CABEZA BAJA!

Número 1: lleva tus caderas y piernas (las partes más densas de tu cuerpo) a la posición más alta posible en el agua. Esto automáticamente elimina mucha presión de los músculos que están trabajando en mantener la posición del cuerpo horizontal en el agua.

Número 2: crea una mejor ola de avance. Cuando nadas creas una ola delante de tu cuerpo, como un barco. Si respiras con la cabeza arriba, creas una gran ola que te obliga a llevar tu cabeza más arriba. Mantener la cabeza baja hace una ola más pequeña, pudiendo coger aire fácilmente.

Y número 3: incrementa la potencia de brazada. Cuando tu cabeza está alta, usarás el 70 por ciento del tirón de tu brazo sólo para mantener tu cabeza fuera del agua. Esto deja sólo el 30 por ciento para tu propulsión hacia adelante. Deja caer la cabeza para tu beneficio. ¡La mayoría de tu esfuerzo se va en mantenerte fuera del agua!