¿Estuviste fuera del agua por un tiempo? ¡Toma estos atajos!

Dos consejos y atajos que te servirán para que regresas a tope a la alberca

 

 

La temporada de descanso se esfuma y lo que está hecho, está hecho. En lugar de enfocarte en lo que no hiciste en los meses de frío, enfócate en cómo maximizar tu tiempo antes de las primeras competencias. Consistencia y tiempo en el agua son la clave para que puedas desarrollar nuevas metas y tener mejor desempeño en el agua.

Sabemos que el frío juega un papel crucial en los entrenamientos, porque a nadie le dan ganas de nadar con el clima en 0º o no más de 5º. Afortunadamente, aquí hay dos estrategias que te ayudarán a mejorar mucho con una inversión mínima.

 

Lleva tus bandas

Cuando tu meta es nadar rápido, el poder y la mecánica deben ser marcados mientras te mueves. Una serie de bandas de resistencia puede ser una forma muy sencilla de mejorar tu entrenamiento, además de potencias movimientos de brazada. Trata de incorporar 15 minutos de entrenamiento con bandas dos veces a la semana. Esta rutina crea conexión neuromuscular para poner a tono el moto de agilidad y mecánica que han ido practicando.

 

Mira el reloj

Es muy emocionante poder involucrarte con cientos de metros e ignorar los intervalos y la velocidad cuando regresas a entrenar. ¡El reloj puede ser intimidante! Pero enfócate en las metas, pensando en el tiempo que quieres lograr en la competencia. Tener un tiempo estimado te ayudará a pensar en cómo puede trabajar los intervalos y los días de velocidad para que los segundos vayan reduciéndose en el reloj.

 

 

Recuerda que hacer entrenamientos específicos siempre tendrá un beneficio en los resultados finales. Puedes pensar en un día de natación suave con distancia y técnica, otro día con intervalos a ritmo de carrera y un día más de repeticiones cortas pero a muy alta intensidad.