7 tips para hidratarte encima de la bici

No te seques rodando

 

 

Una correcta hidratación es posiblemente el capítulo más importante que debemos  tener en cuenta durante el segmento del ciclismo en un triatlón. Debe presentarse en todo momento , pero especialmente en esta disciplina debes  mostrar  mayor esmero, ten en cuenta que si no repones las pérdidas hídricas, estarás reforzando innecesariamente a tu riñones, sobre todo en días donde has entrenado muchas horas o el trabajo muscular ha sido especialmente intenso.

 

Te contamos 7 tips para hidratarte correctamente y te enseñamos a preparar tu propias bebidas isotónicas.

 

1.Hidratación pre-carrera

Entre treinta y cuarenta y cinco minutos antes de la salida, lo más adecuado sería beber entre 300 y 500 mililitros. Lo que sería medio bidón o un bidón entero de agua con sales y que contenga de 30 a 50 gramos de carbohidratos.

 

2. Agua desde el inicio de la prueba

Toma sorbos de agua cada 20-30 minutos un promedio de 500 mililitros, cada hora una bebida que contenga carbohidratos y sales para reponer los fluidos y electrolitos que pierdes al sudar.

 

3. Más que agua

Además de agua hidrátate con una bebida que contenga 30-40 gramos de carbono con 250-500 miligramos de sodio. Los hidratos te darán la energía que necesitan tus músculos para seguir pedaleando.

 

4. Checa la temperatura

El agua debe estar relativamente fría (5ºC), pues a esa temperatura el líquido se vacía rápidamente del estómago y es absorbida por el intestino delgado.

 

5. Mantente fresco

Bebe la cantidad de líquido suficiente que permita  a tu cuerpo mantener el rendimiento deportivo lo más intacto posible mediante el balance de sales minerales.

 

6. ¿Dónde pongo el bidón?

Hay muchas formas de llevar los recipientes de hidratación en la bicicleta, en el cuadro, detrás del asiento, etc… y cada uno de estos tiene una influencia en el rendimiento del ciclista.

 

7. Hidratación post-carrera

Lo más recomendable es que dentro de las dos horas siguientes a la finalización repongas 1,5 veces las pérdidas que hayas tenido durante el ejercicio. Lo más acertado sería saber lo que pesabas antes de comenzar y al terminar.