¿Cerveza después de entrenar?

Un estudio indica que una “güera” al día podría equilibrar tus niveles de colesterol, además de otros beneficios.

Una de las bebidas alcohólicas que contiene menos grados de alcohol es la cerveza, pero además es una de las pocas que contienen vitaminas y minerales de forma natural.

Una cerveza clara puede ayudarte a equilibrar los niveles de colesterol, así como a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares por sus efectos anticoagulantes.

¡Pero tampoco te emociones! Los especialistas recomiendan que solo tomes una al día, no más.

Aunque ten cuidado, la cerveza puede aportarte 50 Kcal por cada 100 mililitros. Por eso es mejor que lo tomes con control.

¿Pero es recomendable tomarlo después de entrenar?

El lúpulo, que es uno de los ingredientes fundamentales de la cerveza, retrasa el envejecimiento e influye positivamente en los parámetros sanguíneos del metabolismo oxidativo.

Por ello, sí puede tomarse después de entrenar, pero nunca sustituyendo una bebida deportiva o agua, y mucho menos superando los límites establecidos. ¡Podrías deshidratarte si no tienes un control!