3 razones para hacer ejercicio en el agua

Si eres de las personas a las que no les gusta correr, ir al gimnasio o hacer cualquier otro tipo de actividad física, ejercitarse en la alberca es una excelente opción.

Algunas personas optan por los deportes acuáticos cuando sufren alguna lesión, por ejemplo, hace unos meses, debido a una lesión cervical, mi doctor me prohibió hacer cualquier ejercicio que involucrara movimientos pliométricos, por lo que las opciones más viables para mi estilo de vida se redujeron a: caminar, hacer yoga o nadar.

Yo no era fanática a los deportes en alberca porque realmente no sabía nadar, a duras penas intentaba flotar (jaja), sin embargo, practicar esta disciplina fue la perfecta opción para mantenerme en movimiento mientras me recuperaba.

¡La actividad física le brinda excelentes beneficios a tu estilo de vida! Así que por la razón que sea, si la vida te llevó a comenzar a ejercitarte en el agua, o simplemente porque tienes curiosidad de experimentar, te dejo tres razones por las que debes (sí o sí) practicar natación en algún momento.

De acuerdo a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE), los aspectos principales para practicar este tipo de deportes son:

Destreza de músculos: el sistema neuromuscular, que es el encargado de desarrollar fuerza, coordinación, técnica y habilidades motrices se potenciará al desenvolverse bajo el agua. ¡Es real!
Mejorarás tu respiración: sí, sabemos que bajo el agua es imposible, pero al poner en práctica las diferentes formas en que se respira bajo el agua, tu sistema respiratorio se verá beneficiado con estos deportes.
Menos impacto: a diferencia de correr, al nadar podrás ejercitar cada parte de tu cuerpo sin someter tu cuerpo a cualquier clase de impacto que pueda causarte una lesión, haciéndolo un deporte perfecto para fortalecer, estar en forma y librarte de las lesiones (o en otros casos, recuperarte de las mismas).